El Programa de Inversiones Intensivas en Empleo (PIIE) de la OIT cuenta con más de 40 años de experiencia en más de 70 países vinculando el empleo con el desarrollo de infraestructuras. El PIIE promueve tecnologías basadas en la mano de obra que ofrecen grandes ventajas en cuanto a la utilización de las inversiones en infraestructuras para crear trabajo y oportunidades de generación de ingresos, y para desarrollar las habilidades y capacidades de las comunidades locales.

El PIIE utiliza el ciclo del proyecto de infraestructura como medio para realizar sus objetivos de creación de empleo, participación local y uso de recursos, y para promover la buena gobernanza. Estas Directrices Ilustradas para los Programas de Inversión Intensiva en Empleo (PIIE) con perspectiva de género destacan cómo el ciclo del PIIE tiene puntos de entrada en los que se puede promover la igualdad de género. Dichos puntos de entrada incluyen: garantizar que los grupos desfavorecidos puedan participar y contribuir de forma significativa a la planificación y ejecución de la infraestructura rural; implicar a las mujeres en los procesos de planificación; y garantizar que también puedan beneficiarse del empleo ofrecido. Permitir que las mujeres accedan al empleo también requiere medidas específicas en función de las costumbres y la cultura locales. Medidas como la igualdad de retribución por un trabajo de igual valor, el cuidado de los hijos, la fijación de cuotas, la disponibilidad de trabajos cerca de casa, la flexibilidad de horarios y las opciones de trabajo a tiempo parcial tienden a mejorar la participación de las mujeres.