Esta historia fue escrita por la Sala de Noticias de la OIT. Para ver las declaraciones y discursos oficiales de la OIT, por favor visite nuestra sección "Declaraciones y Discursos".

Tráfico de niños en la República de Moldova

Alrededor de 1,2 millones de niños en todo el mundo son víctimas de tráfico infantil. Tal fue el caso de Ioana, una niña a la que se trasladó de la República de Moldova a Ucrania. Informa Natalia Cojocaru, periodista moldava el periódico «Timpul».

Artículo | 15 de marzo de 2004

CHISINAU, Moldova – El año pasado la vida de Ioana, de tan sólo quince años, se volvió insoportable. A pesar de ser la mejor alumna de su clase, abandonó la escuela y decidió irse de casa y dejar a sus padres alcohólicos para vivir con sus abuelos.

Un día, en el mercado de la capital de Moldova, se encontró a una mujer de un pueblo vecino que escuchó solícitamente sus penas y le propuso acompañarla a Ucrania en donde podría encontrar un empleo.

La aduana no planteaba ningún problema. A pesar de su edad, Ioana pudo atravesar la frontera en compañía de un extraño, con un certificado de nacimiento de la hija de un traficante (de la vecina) como único documento de identidad.

De septiembre a abril de 2003, se obligó a Ioana a vender productos en el mercado de Ucrania. Como compensación, recibió un par de prendas de vestir de invierno y comida. Finalmente, la policía de Ucrania que la había estado buscando a petición de su madre, encontró a la niña y la devolvió a su hogar. Paradójicamente, al parecer Ioana declaró a la policía que prefería la vida con el traficante que su propia casa, porque la vida de fugitiva era mejor que con sus padres alcohólicos.

La historia de Ioana, aunque no totalmente típica, es desgraciadamente muy corriente en esta nación empobrecida y en otras partes de la región. Si bien se desconoce el número exacto de niños de la República de Moldova y de otros países de la zona que son víctimas de la trata y no se dispone de datos de las autoridades locales, el Centro Provisional para Menores de Moscú, Rusia, estima que más del 50 por ciento de los niños que piden limosna en las calles de Moscú proceden de la República de Moldova. En 2001, el Ministerio del Interior de Rusia registró que se había traficado con 500 menores de la República de Moldova a Rusia para ejercer la mendicidad y, algunos de ellos habían sido víctimas de abusos sexuales.

El primer informe anual del Centro de intercambio de información para la lucha contra el tráfico (Nota 1) revela que la mayoría de las víctimas de la trata con fines de explotación sexual de la República de Moldova a otros países, en particular los países bálticos, tienen entre 18 y 24 años. Según otras fuentes, se trafica con niños más jóvenes para su explotación económica en Rusia y Ucrania. Al no exigirse un visado para los Estados miembros de la Comunidad de Estados Independientes resulta más fácil el transporte ilegal de los niños dentro de esta región.

La Organización Internacional para las Migraciones y la organización no gubernamental «La Strada» han informado que 40 por ciento de los niños víctimas del tráfico con destino a la Comunidad de Estados Independientes, Bosnia y Herzegovina, Croacia, Macedonia, Serbia y Montenegro, Kosovo y Albania proceden de familias monoparentales abusivas o han estado en internados. Más de la mitad son huérfanos, o han perdido todo contacto con sus padres.

En cualquier caso, son una presa fácil para los traficantes. A menudo se recluta a los menores en las zonas rurales en donde aproximadamente el 60 por ciento corren un mayor riesgo de caer en la pobreza debido a los bajos niveles de productividad e ingresos en el sector de la agricultura de la inmensa mayoría de los trabajadores rurales.

La República de Moldova, Rumania y Ucrania son identificados como los principales países de origen, y Albania es una fuente principal y un país de tránsito para la trata de mujeres y de niños de los Balcanes a Europa Occidental. Para ayudar al Gobierno de la República de Moldova a cumplir los compromisos contraídos en el marco de las normas internacionales del trabajo pertinentes que regulan el tráfico de niños (Nota 2), la OIT incluyó a ese país en el proyecto subregional que se puso en marcha recientemente para la «Lucha contra el tráfico de niños con fines de explotación laboral y sexual en los Balcanes, Ucrania y la República de Moldova».

Este proyecto de tres años estará financiado por los Gobiernos de los Estados Unidos y Alemania y su aplicación correrá a cargo del Programa Internacional de la OIT sobre la Erradicación del Trabajo Infantil (IPEC), el primero en llevar a cabo programas de acción contra el trabajo infantil.

Los principales objetivos del proyecto son mejorar la capacidad de los gobiernos, de las organizaciones de trabajadores y de empleadores, las ONG y otras organizaciones de la sociedad civil relacionadas con la trata de niños para prevenir y eliminar de forma eficaz el trabajo infantil, dando prioridad a sus peores formas; reforzar los mecanismos existentes; y facilitar el intercambio de conocimientos y experiencias sobre el trabajo infantil y repetir los casos de mejores prácticas a nivel nacional y subregional.

En consonancia con las disposiciones del Memorándum de Entendimiento recientemente firmado para la cooperación en el ámbito de la erradicación del trabajo infantil, y comprometiéndose a garantizar la «responsabilización» nacional y sostenibilidad de las intervenciones del IPEC, el Gobierno de la República de Moldova creará un Comité Directivo Nacional (NSC) para supervisar los logros obtenidos por el Gobierno y los organismos competentes en relación con los objetivos y metas establecidos por el programa de la OIT.

La participación de diversos socios gubernamentales, sociales y no gubernamentales en el Comité Directivo Nacional contribuirá a integrar las cuestiones de los niños trabajadores en todas las políticas nacionales pertinentes.


Nota 1

Nota 2 - Convenio sobre la edad mínima, 1973 (núm. 138) y Convenio sobre las peores formas de trabajo infantil, 1999 (núm. 182).